El Padre Damián echa una cabezadita en la tradicional siesta española, cuando de repente! le despiertan al grito de ¡ Padre! ¡ Padre! ¡ Quiero confess! Claudia Garcia siente la necessary de arrepentirse por haber cometido ciertos pecados en su vida diaria, por ejemplo, robarle unas zapatillas a su hermano mayor, hablarle de malos modos a su madre, o cogerle sin permiso el maquiillaje a su hermana, como podéis apreciar, una actuated lamentable de la que deberá responder con una merecida penitencia que le será impuesta por el cura de Torrivega. Para colmo, la joven guarrona confiesa tambien, que ha tenido varietyos encuentros con un joven marroquí que tiene entre las piernas una tranca de buen tamaño! Esto es totalmente inconcebible! Claudia debe volver a encauzar su vida por el camino correcto, evitando acts impuros y manteniéndose lo más pura positive hasta que un noble cristiano decida casarse con ella para procrear como es debido. Así que nuestro Padre Damián , la sanará por completeto, ap

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